
Un septiembre más sin fallar a la cita en Guara.
Ocho amigos del norte, casi todos del Kea Kirol Taldea (Grupo Deportivo Kea) y el que subscribe, nos aventuramos otro año por la Sierra de los Cañoñes de Guara, esta vez en modo travesía.

Desde Ainsa, fin de la travesía, accdemos al Pico del Aguila con un taxi. Comenzamos a pedalear a las 9 de la mañana para llegar a Rodellar a la 17’30, casi 9 horas para 46 kms. Difícil de entender, pero no en vano son aproximadamente un 98 por ciento de sendas con varios porteos, alguno de más de una hora. Guara Mata, como se suele decir, y a más de uno le paso factura el primer día.


Rodellar como siempre lleno de escaladores, y el Mascún más seco que nunca.

La segunda etapa parece el final de la primera, no consigues que pasen los kms. Comienzas remontando 500 m en 4 kms en una hora. Continuas con 6 kms hasta el segundo rapel del comienzo del descenso del Mascún en dos horas y media en un sube y baja interminable, donde estas más rato a pie que encima de la bici, y en donde el precipicio es una constante a tu izquierda.

La salida del Mascún es la parte más especial de la ruta, pues desde lejos no adivinas por donde se pasa. Tiene truco y al final los porteos con la bici pegada al cuerpo y, medio trepando, no son tan complicados como parece desde el otro lado del baranco.
Llegar a Ainsa bajando Pais de Lobos es el premio final a dos días insuperables, por ruta y por la compañía.
